
Ocho problemas de leggings que todas hemos vivido Foto/Especial
Martes 02 de Junio de 2015
Ciudad de México 1 de junio del 2015. Sabes que licras o los llamados leggings te quedan?. Los compras por los diseños y no por como te queden?. Sabes cuales son los problemas que todas hemos vividos al usarlos? quí te decimos algunos de ellos:
1. Cuando los leggings tienen patrones ridículos y futuristas color neón con unicornios y paisajes urbanos. ¿Y cómo voy a combinar eso? Es lo primero que pasa por tu cabeza, no sabes si lograrás un look 'edgy' o simplemente ridículo.
2. Cuando de la nada se transparenta TODO. Aunque juras que así no eran cuando los compraste, te das cuenta que tienes que ver tu look en diferentes luces antes de salir de la casa.
3. Lo peor... ¡'camel toe'! Las oportunidades de que tus partes íntimas se marquen son infinitas.
4. Cavar y cavar en tu clóset para encontrar el buen par. Todas tenemos nuestros leggings favoritos, no importa si tenemos 50 o más, siempre hay unos con los que estamos súper cómodas.
5. Ese horrible momento donde te das cuenta que tienes marcas de sudor debajo del 'booty'. Que sin duda todo el mundo pudo ver, ¡pena mil!
6. Cuando los negros son grises ahora. ¡Gracias lavadora! Ahora tengo que usar los leggings incómodos.
7. Cuando tus leggings favoritos ya están rotos en el interior del muslo. Adiós a tus mallas favoritas, ahora la misión imposible de conseguir un par igual de cómodos.
8. Cuando ya están tan estirados que parecen pijama. Lo que una vez fue un par impresionante de leggings que te ponías para todo, ahora son sacos holgados que revolotean alrededor de tus piernas y tobillos.
Fuente/Cosmopolitan
1. Cuando los leggings tienen patrones ridículos y futuristas color neón con unicornios y paisajes urbanos. ¿Y cómo voy a combinar eso? Es lo primero que pasa por tu cabeza, no sabes si lograrás un look 'edgy' o simplemente ridículo.
2. Cuando de la nada se transparenta TODO. Aunque juras que así no eran cuando los compraste, te das cuenta que tienes que ver tu look en diferentes luces antes de salir de la casa.
3. Lo peor... ¡'camel toe'! Las oportunidades de que tus partes íntimas se marquen son infinitas.
4. Cavar y cavar en tu clóset para encontrar el buen par. Todas tenemos nuestros leggings favoritos, no importa si tenemos 50 o más, siempre hay unos con los que estamos súper cómodas.
5. Ese horrible momento donde te das cuenta que tienes marcas de sudor debajo del 'booty'. Que sin duda todo el mundo pudo ver, ¡pena mil!
6. Cuando los negros son grises ahora. ¡Gracias lavadora! Ahora tengo que usar los leggings incómodos.
7. Cuando tus leggings favoritos ya están rotos en el interior del muslo. Adiós a tus mallas favoritas, ahora la misión imposible de conseguir un par igual de cómodos.
8. Cuando ya están tan estirados que parecen pijama. Lo que una vez fue un par impresionante de leggings que te ponías para todo, ahora son sacos holgados que revolotean alrededor de tus piernas y tobillos.
Fuente/Cosmopolitan