La política y el fútbol...de la mano en Cancún.
Martes 19 de Junio de 2012 hrs.
Lionel Messi, se “disculpó con Cancún”. Y no solo dejó plantados a los cientos de personas que habían pagado miles de pesos por asistir a una cena con el astro argentino, sino que el cuerpo de seguridad que no tiene ni en España, privó a sus seguidores del perseguido autógrafo el día del encuentro futbolístico en una cancha deportiva en Cancún.
Según dijo el argentino, el causante del atraso habría sido la pérdida de su vuelo. Por otro lado, para los aficionados al encuentro futbolístico, la calidad del juego en cuestión, tampoco lleno las expectativas que se esperaba.
Para colmo, 15 minutos antes del término del tan esperado encuentro, el astro argentino, llamado el “mejor jugador del mundo” y suponemos el mejor pagado, agarró vuelo y salió del estadio, rodeado de un cuerpo de seguridad que ya lo quisiera Barak Obama.
Acciones que no pasaron desapercibidas para los tele espectadores, que se quedarán con la duda si en realidad Cancún y Quintana Roo, son tan seguros de visitar como se promociona.
Y mientras Lionel Messi se ausentaba del encuentro empresarial político en Cancún que lo esperaba expectate con una costosa cena, Peña Nieto llegaba entusiasmado, a su gira proselitista. Si había encuentro o no con el joven Lionel, sabemos el resultado.
Ciertamente, el esfuerzo de las autoridades de gobierno se destaca. Aunque no se habla de cifras. Y tampoco sobre las expectativas sociales y económicas que dejó a los organizadores y espectadores ese resultados final de goles.
Fue un fin de semana agitado y convulsivo. No solo Messi acaparó la atención. La llegada de Enrique Peña Nieto a Chetumal y Cancún, ocupó la mente, cuerpo y espitiru de los priistas. Así como la de los perredistas que recibieron a Andrés M. López Obrador en Cancún ese domingo. Los dos, percibieron una amenaza de lluvia que no llegó. Quizá el tiempo estuvo conmovido por el término de una campaña que cerrará urnas en dos escasas semanas.
Un fin de semana de política y futbol. Dos temas que sin duda, muchas veces han corrido juntos por el mismo sendero.
Según dijo el argentino, el causante del atraso habría sido la pérdida de su vuelo. Por otro lado, para los aficionados al encuentro futbolístico, la calidad del juego en cuestión, tampoco lleno las expectativas que se esperaba.
Para colmo, 15 minutos antes del término del tan esperado encuentro, el astro argentino, llamado el “mejor jugador del mundo” y suponemos el mejor pagado, agarró vuelo y salió del estadio, rodeado de un cuerpo de seguridad que ya lo quisiera Barak Obama.
Acciones que no pasaron desapercibidas para los tele espectadores, que se quedarán con la duda si en realidad Cancún y Quintana Roo, son tan seguros de visitar como se promociona.
Y mientras Lionel Messi se ausentaba del encuentro empresarial político en Cancún que lo esperaba expectate con una costosa cena, Peña Nieto llegaba entusiasmado, a su gira proselitista. Si había encuentro o no con el joven Lionel, sabemos el resultado.
Ciertamente, el esfuerzo de las autoridades de gobierno se destaca. Aunque no se habla de cifras. Y tampoco sobre las expectativas sociales y económicas que dejó a los organizadores y espectadores ese resultados final de goles.
Fue un fin de semana agitado y convulsivo. No solo Messi acaparó la atención. La llegada de Enrique Peña Nieto a Chetumal y Cancún, ocupó la mente, cuerpo y espitiru de los priistas. Así como la de los perredistas que recibieron a Andrés M. López Obrador en Cancún ese domingo. Los dos, percibieron una amenaza de lluvia que no llegó. Quizá el tiempo estuvo conmovido por el término de una campaña que cerrará urnas en dos escasas semanas.
Un fin de semana de política y futbol. Dos temas que sin duda, muchas veces han corrido juntos por el mismo sendero.